Infinita Tristeza...
>> martes, agosto 26
Aquí en las antípodas, debajito de la ergástula de mis miedos, yace un dios enfermo, que soñando está, malignos sueños.
Aquella canción Húngara de la tristeza, o "gloomy sunday", conocida también como canción suicida, daba vueltas y vueltas en mi cabeza, pero más que triste sonaba sombría, sin el brío despiadado de la muerte, sino con la lentitud dolorosa de la enfermedad...
Cuando todo se enreda y va camino de todas partes y aparecen cerca de ti figuras que aparecen y desaparecen como visiones completas de una realidad a la cual no tienes acceso continuo, como pedazos de todo , que es diferente a la suma de las partes, diferente porque es a veces más , a veces menos, pero siempre te deja la impresión de ser algo diferente, y quedas en el limbo... en una dimensión fractal y dolorosa...
Pero una vez te cansas y pones orden a todo, "creces" decides que las cosas son como tú quieres que sean, te ocupas de las cosas "importantes", piensas en tu imagen y tu futuro, y todo el esfuerzo hecho para que estés parado donde estás parado con la posibilidad de decidir hacia dónde ir... con la seguridad que todos los cualquier parte te pertenecen, y caes laxo, tímidamente, hacia un lugar umbrío de tristes presagios pero con el presente bajo los pies... y el piso deja de temblar, y le das seguridad a otros, y crece una forma de ver el mundo dentro de ti, una parte en tu interior que va ordenando todo, muchas veces de manera violenta, sobre todo cuando te encuentras con personas que son como antes eras tú...
Hasta que llegas a un lugar tan profundo, un abismo tan grande que miras el vacío y sabes que no habrá marcha atrás, y ves como esos otros saltan sin miedo, en decisiones demenciales, y creen tener alas, y van cayendo hasta que se pierden en el infinito, y no sabes cuál será su destino, sólo sabes que tu final ha llegado... y una duda te asalta el corazón... ¿habrá una dimensión especial para ellos? será que finalmente sus sentidos lograron captar esa armonía entre el ser y la nada...
No hay tiempo para dudas, sabes a dónde quieres ir, y cómo llegar... estiras tu mano... y baja ese ángel caido, aparentemente superficial, tan estricto y ordenado, tan loco y bueno, tan distinto... No hace falta decir que si estoy triste es porque dejaré la vida que llevaba... y extrañaré el dolor y el caos... aunque ya no me temas más...
Cuando todo se enreda y va camino de todas partes y aparecen cerca de ti figuras que aparecen y desaparecen como visiones completas de una realidad a la cual no tienes acceso continuo, como pedazos de todo , que es diferente a la suma de las partes, diferente porque es a veces más , a veces menos, pero siempre te deja la impresión de ser algo diferente, y quedas en el limbo... en una dimensión fractal y dolorosa...
Pero una vez te cansas y pones orden a todo, "creces" decides que las cosas son como tú quieres que sean, te ocupas de las cosas "importantes", piensas en tu imagen y tu futuro, y todo el esfuerzo hecho para que estés parado donde estás parado con la posibilidad de decidir hacia dónde ir... con la seguridad que todos los cualquier parte te pertenecen, y caes laxo, tímidamente, hacia un lugar umbrío de tristes presagios pero con el presente bajo los pies... y el piso deja de temblar, y le das seguridad a otros, y crece una forma de ver el mundo dentro de ti, una parte en tu interior que va ordenando todo, muchas veces de manera violenta, sobre todo cuando te encuentras con personas que son como antes eras tú...
Hasta que llegas a un lugar tan profundo, un abismo tan grande que miras el vacío y sabes que no habrá marcha atrás, y ves como esos otros saltan sin miedo, en decisiones demenciales, y creen tener alas, y van cayendo hasta que se pierden en el infinito, y no sabes cuál será su destino, sólo sabes que tu final ha llegado... y una duda te asalta el corazón... ¿habrá una dimensión especial para ellos? será que finalmente sus sentidos lograron captar esa armonía entre el ser y la nada...
No hay tiempo para dudas, sabes a dónde quieres ir, y cómo llegar... estiras tu mano... y baja ese ángel caido, aparentemente superficial, tan estricto y ordenado, tan loco y bueno, tan distinto... No hace falta decir que si estoy triste es porque dejaré la vida que llevaba... y extrañaré el dolor y el caos... aunque ya no me temas más...
3 comentarios:
Hola JozeLuiz, este comentario es solo para informarte que www.knxdt.com desaparecerá en breve. Por el momento estoy redirigiendo el contenido a mi nuevo dominio www.tecnologiadiaria.com, por lo que agradecería actualizaras tus enlaces (como el de tu sidebar) :).
Saludos.
Puf... tremendo. Creo que me he enfrentado a esta decisión también, muchas veces, y nunca acabo de sentirme totalmente satisfecha (inconforme crónica), pero a ratos consigo ser feliz en el proceso y a cada paso. Me gustaría ser capaz de lograr ese bienestar más seguido.
¿Cuándo un café?
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