La luna eclipsada y mis estrellas...

Este miércoles de luna llena y eclipsada danzan raudos miles de pensamientos en mi cabeza... Una estrella en el cielo que se ocultaba y habitaba en ese lugar donde a veces guardo algunos recuerdos... Regulus en el infinito la estrella alfa más brillante de la constelación de Leo...

Y al igual que mis pensamientos Regulus se encuentra sobre la elíptica por la cual la luna pasa 2 veces por mes, y aunque son cubiertos en horas vespertinas, de noche me asaltan , cuando la luna deja de cubrirlos, y me doy cuenta que estuvieron ocultos, y la noche se vuelve más negra... y nunca amanece, nunca.

Penamientos tan antiguos e ilusiones tan nuevas, brillan en mi cielo igual de intensos, la luna más pequeña, rocosa, tan real y cuyo brillo me ciega y da vida, cuyos rayos reflejados del sol la encendieron hace segundos y llegan a mis ojos tan pronto; y en esta noche Regulus y mis recuerdos brillan al costado de la luna, ellos tan antiguos y cuya luz palpita en mi interior, cuyo reflejo propio es de una luz de hace tantos años... y ambos ante mis ojos, se ocultan el uno tras el otro para finalmente aparecer juntos...

Luna llena de mí, ecuación de la complejidad eterea que me sacude, en el cielo oscurecido por el eclipse se vieron muchas otras estrellas, que siempre estuvieron allí, y que probablemente siempre estarán, yaceré allí, lo sé, colgado de una de ellas, un día que levante vuelo, y me aleje de estos momentos...